Por sacarte el sol

Quiero madrugarte los labios,

quiero besarte el alma,

todas las mañanas sacarte el sol con mis dedos.

Da igual que estés lejos, soñándote.

Da igual que el destino te ponga en otro universo,

si me dices te quiero iré a buscarte,

atravesare cielos y mares, que en complejo duelo me encuentro,

que entre olas y vientos no hay huracán que pare todo lo que por ti siento.

Se que el tiempo es un cobarde, que a lo lejos dispara,

sin preguntarme me dio por muerto,

pero aún ahora me queda sangre,

aún late mi corazón tan fiero que ni cien inviernos hacen en él escarcha,

que mi barca resiste mil verbos que quedaron sin contarte.

Si tu me dieras un te quiero, iría a buscarte, sin miedo, sin coraza, con el pecho al aire,

que mi techo es tu alma, la que me calma tan dentro,

llama que clama y contiene estos besos,

los que te daría en la mañana, todos los que no te di antes,

susurrándote palabras nunca pronunciadas, aquellas que pediste y que el tiempo calló,

pero si tu quisieras, si por un instante pidieras, tenerme a tu lado, amor, volaría a tu lado a despertarte, madrugándote los labios, besándote el alma, porque mi corazón es la llave que sin cansarse abre esa puerta, la que saca el día, la que yo te daría, y yo moriría en cada detalle dando mi vida, para con mis dedos ser ave que vuela lejos al alba, para sacarte ese sol y amarte, amor.